24 lugares para descubrir en 24 horas
Su Casco Histórico medieval, el barrio Judío y las casas colgadas sobre el río Oñar ofrecen bellas panorámicas de la ciudad

La ciudad de Girona, con un censo de 97.000 habitantes, es una de esas poblaciones desarrolladas a escala humana, con distancias cortas y accesibles, que ofrecen mayor comodidad y calidad de vida a sus pobladores. Una pequeña capital de provincia con amplia tradición histórica y muy bien comunicada (aeropuerto y alta velocidad). Asimismo, su estratégica situación geográfica la convierte en enclave privilegiado: desde Girona puedes disfrutar en 30 minutos de las playas de la Costa Brava, de los paisajes maravillosos de los Pirineos o de la zona volcánica de La Garrotxa. Pasear por las estrechas y empedradas calles y plazas, bien conservadas, de su Casco Histórico o Barri Vell, es una experiencia que sumerge en la Edad Media, cuando la ciudad vivió uno de los mayores momentos de esplendor. Visita mercados al aire libre como el Mercado de las Flores o el Mercado de la Leona, recorre los puentes sobre el río Oñar con la bella panorámica de sus coloristas casas y disfruta de sus restaurantes, entre los que se encuentra El Celler de Can Roca, galardonado como uno de los mejores del mundo.
Dos mil años de historia El origen de Girona se remonta a asentamientos íberos de la tribu de los indigetes en los poblados que rodeaban el Llano de Girona, y ya hacia el 77 a. C. los romanos fundaron la originaria ciudad llamándola Gerunda. Tras una breve dominación árabe, cayó dentro del área de influencia del imperio carolingio, siendo sede del Condado de Gerona. Esta es la época de máximo esplendor de la comunidad judía de Girona con la escuela cabalística. Durante los siglos XIV y XV se amplían las murallas y se produce el ensanche medieval con nuevas calles y plazas porticadas que hoy día conservan toda su belleza. Ya en el siglo XIX, el modernismo dejó en la ciudad verdaderas joyas arquitectónicas como la Casa Masó o la Casa de la Punxa. Descubre con Viajeroshoy 24 lugares imprescindibles de Girona en 24 horas.
1. La Força Vella

El corazón de la ciudad se encuentra en el Barri Vell o casco antiguo, cercado por tramos de la antigua muralla, algunos de los cuales pueden recorrerse por un estrecho paseo de piedra desde el que se contempla una bella vista de la ciudad. El epicentro de este casco antiguo es La Força Vella, el lugar más elevado, donde los romanos fundaron Gerunda en el siglo I a. C, construyendo una fortaleza con un perímetro triangular con grandes sillares de piedra. Este fue el primer núcleo habitado y permaneció casi inalterado hasta el año 1000. En la actualidad su conservación es excelente y es la zona más visitada.
2. El Call Jueu (Barrio Judío)

También dentro del casco antiguo se encuentra otro de los grandes símbolos de la ciudad: el Call o Barrio Judío. Un laberinto de calles escalonadas y patios que conserva en magnífico estado su aspecto medieval. En él se encuentra el Centro Bonastruc Ça Porta, la posible antigua sinagoga convertida en centro de estudios y Museo de Historia de los Judíos. En estas calles se desarrolló una importante escuela cabalística y vivió una pequeña comunidad judía hasta finales del siglo XV.
3. Catedral de Santa María

En el lugar más elevado de la Força Vella se alza la Catedral de Santa María, construida entre los siglos XI y XVIII en tres estilos arquitectónicos: románico, gótico y barroco. El claustro y la torre de Carlomagno son románicos, la única y gran nave, de los siglos XV-XVI, es el espacio gótico abovedado más ancho del mundo (23 metros) y la fachada y la escalinata de tres tramos de acceso son barrocas. En el Museo de la Catedral, instalado en la sala capitular y la sacristía, podrás admirar valiosas obras como el Tapiz de la Creación, pieza única y excepcional del románico; la Arqueta árabe cordobesa, del siglo X; así como el Beato de Gerona, uno de los tres beatos que se conservan del siglo X, copia de los Comentarios al Apocalipsis de Beato de Liébana. La visita incluye la nave, el Tesoro y el claustro, así como la basílica de Sant Feliu.
4. El ensanche medieval y las murallas

En torno a la Força Vella se configuró la ciudad medieval entre los siglos XI y XV con nuevos barrios -Sant Feliu y Sant Pere al norte, el Areny y la Vilanova al sur, y el Mercadal al oeste-, protegidos con nuevas murallas algunos de cuyos tramos puedes visitar. La ampliación de las murallas romanas en época medieval permite hoy día pasear por el antiguo camino de ronda y recorrer los tramos de muralla carolingia más extensos de Europa (s. IX). Las diversas torres que la jalonan son auténticos miradores privilegiados sobre la ciudad y sus alrededores.
5. Baños Árabes

Muy cerca de la Catedral, junto a la muralla, se encuentran los Baños Arabes, construcción románica del siglo XII inspirada en los baños romanos. Cuentan con una amplia y bellísima estancia de entrada destinada a sala de descanso y vestuario. En ella sobresale una bóveda anular y una cúpula central que se asienta sobre finas columnas y capiteles bajo los cuales se encuentra una pileta circular para el baño. En la actualidad se utiliza como sala de exposiciones.
Ferran el Catòlic s/n. Tel. (+34) 972213262.
6. Monasterio de San Pedro de Galligans
 
Bajando desde los Baños Árabes por una estrecha calle empedrada encontrarás la amplia Plaza des Jurats con la muralla del ensanche medieval a la derecha, un soportal con arcos a la izquierda y en frente el Monasterio de San Pedro de Galligans, antigua abadía benedictina que hoy es sede del Museo de Arqueología de Cataluña en Girona, al que accedemos tras cruzar un pequeño puente de piedra. La construcción del monasterio se inició en el siglo X fuera de las antiguas murallas de La Força Vella. En el exterior destaca el campanario de forma octogonal de dos pisos con ventanales arqueados y el rosetón de la fachada. La iglesia actual fue construida en 1130 y consta de tres naves con crucero y cuatro ábsides. El pequeño claustro es una bella muestra del románico catalán.
Carrer de Santa Llúcia, 8. Tel.(+34) 972 202 632
7. Capilla de San Nicolás
Frente a la fachada del Monasterio de San Pedro de Galligans se encuentra la capilla románica de San Nicolás del siglo XII. La capilla se levanta sobre un antiguo cementerio medieval. Originalmente fue una construcción de planta central, cuadrada, con cuatro ábsides semicirculares y cubierta con una cúpula octogonal. Posteriormente se suprimió el ábside occidental y se sustituyó por una nave cubierta con bóveda de cañón. El interior está desprovisto de ornamentación y se destina actualmente como sala para exposiciones.
8. Basílica de Sant Feliu
Caminando hacia sur, buscando el río Oñar, entre calles y plazas medievales, encontramos la Basílica de San Feliu, que fuera primera catedral de Girona hasta el siglo X. En Sant Feliu sobresale su esbelto campanario (s. XIV-XVI). De aspecto acastillado, la cabecera románica se completó con las naves góticas y la fachada barroca (s. XIII-XVIII) a la que se accede por un gran escalinata. El interior conserva destacadas obras de arte, como los ocho sarcófagos paganos y paleocristianos (s. IV) y el Cristo yacente (s. XIV) del maestro Aloi. Pujada de Sant Feliu, 29.Tel. (+34) 972 201 407.
9. La universidad y Sant Domènec
El campus de Letras y el Rectorado se alojan, respectivamente, en el convento de Sant Domènec y en Les Àligues. El convento de Sant Domènec (s. XIII-XIV), uno de los primeros edificios góticos de Cataluña, tiene en la iglesia, el aula capitular y el claustro grande sus elementos principales. Del edificio de Les Àligues, sede de la antigua universidad, se conserva solo la fachada (s. XVI), raro ejemplo en la ciudad de arquitectura renacentista.
10. Rambla de la Libertad
Paralela al río Oña discurre la Rambla de la Libertad con sus bellos soportales de arcadas desiguales que durante siglos ha sido el centro comercial y de ocio de la ciudad. Sin embargo, la existencia de la rambla con su aspecto actual data del finales del siglo XIX cuando el arquitecto Martí Sureda unificó diferentes calles y plazas para crear un paseo arbolado que se llamó Rambla de la Libertad, en honor al árbol de la libertad que se plantó en 1869, durante el sexenio democrático. No obstante, el paseo conserva una parte porticada medieval y algunos de los palacios de la misma época. También se encuentra la Casa Norat (1912) con una destacada fachada modernista. Lugar de numerosos comercios, cafeterías, terrazas y de paseo concurrido.
11. Plaça del Vi
Otro de los lugares más visitados de la ciudad por su belleza, por encontrarse allí el Ayuntamiento y por ser escenario de diferentes celebraciones festivas es la Plaça del Vi, que se encuentra detrás del inicio de la Rambla de la Libertad a la altura del Puente de Piedra. Este espacio alargado y rectangular está delimitado por soportales a un lado, por el Palacio del General (edificio gótico-renacentista) a otro, y el Ayuntamiento y el Teatro Municipal. En las arcadas ante el Ayuntamiento se encuentran los Cuatro Santos Mártires de Girona, empotrados en la casa Barceló, relieve de piedra del siglo XV con las cabezas de los santos Germán, Paulino, Justo y Scici, los que la tradición afirma que eran albañiles. Bajo los arcos de la Plaza se encuentran diferentes restaurantes, como Plaça del Vi 7, cuya comida y bebida hacen honor al nombre de Plaza del Vino.
12. Teatro Municipal
or la misma Plaza del Vi se accede a la fachada del Teatro Municipal de Girona. Su edificación se realizó entre 1857 y 1860 con diseño del arquitecto municipal Martí Sureda. El teatro, con forma de herradura y con una gran caja escénica se construyó según los patrones de los teatros isabelinos de la época. Su interior es espectacular con una sala de espectáculos de cuatro pisos de palcos y un gran patio de butacas. En 1999 se inició un proceso de renovación, cuyas obras finalizaron en octubre de 2006. Plaça del Vi,1. Tel. +34 972 419 010. http://www.girona.cat/teatremunicipal/.
13. Sant Martí Sacosta
El casco histórico de Girona ha conservado a lo largo de los siglos numerosos rincones medievales y modernos de una atmósfera y belleza excepcionales donde el tiempo parece haberse detenido. Uno de ellos es el que conforman la iglesia del antiguo convento de Sant Martí (s. XVII), con la fachada y las escaleras barrocas que la preceden, y la Casa-Palacio Agullana (s. XVI-XVII), cuyo gran arco cubierto y oblicuo constituye una de las imágenes más singulares y fotografiadas de la ciudad. .
14. Plaza de la Independencia
Cruzando el río Oña hacia el sur por el Puente de San Agustín se accede a la Plaza de la Independencia, uno de los lugares más frecuentados por los gerundenses para pasear y disfrutar del ocio por las cafeterías y restaurantes con terrazas que acogen los bellos soportales. En la plaza podemos encontrar negocios conocidos por su historia y antigüedad como el Café Royal, el Cine Albéniz y Casa Marieta. Situada en el Barrio de Mercadal, en el centro de la ciudad, la plaza se asienta donde estuvo el Convento de San Agustín, por lo que también se conoce como Plaza de San Agustín. Fue proyectada por Martí Sureda, con planta rectangular, constituyendo un espacio porticado de gusto neoclásico. En su centro se alza, desde el año 1894, el monumento Girona 1809, de Antoni Parera, dedicado a los defensores de la ciudad frente a los franceses durante la Guerra de la Independencia Española.
15. Casas del Oñar
El río Oñar divide la ciudad en dos partes: al norte el casco histórico y al sur la parte nueva. Sobre la ribera del río se construyeron a lo largo del tiempo bellas casas colgadas, pintadas en vivos colores, que han sido una de las imágenes más representativas de la ciudad, sobre cuyos tejados sobresalen la Catedral y Sant Feliu. La más destacada es la Casa Masó, con su hermosa fachada en blanco, que desde 2006 es la sede de la Fundación Rafael Masó. Todas las fachadas de estas casas están pintadas siguiendo la paleta cromática de Enric Ansesa, Jaume Faixó y los arquitectos J. Fuses y J. Viader.
16. Casa Masó
La más emblemática de las casas sobre el río Oñar es la Casa Masó. Situada en el número 29 de la calle Ballesteries es un símbolo de la evolución del Novecentismo en Girona y fue casa natal de Rafael Masó i Valentí, destacado arquitecto gerundense. Es una de las obras más importantes de su arquitectura y la única abierta al público de las famosas casas del río. La casa tiene la fachada pintada de blanco con los ventanales en azul marino sobre los que descienden persianas marrones de madera. El interior posee una bella decoración y mobiliario modernista. Sólo se puede visitar en visitas guiadas para grupos reducidos de como máximo 8 personas y en horas predeterminadas.
17. Puente de Piedra
La necesidad de unir las dos partes de la ciudad separadas por el río Oñar: la orilla derecha (Barrio Viejo) y la orilla izquierda (Barrio de Mercadal) han llevado a la construcción de diferentes puentes a lo largo de los siglos, que ayudaron al desarrollo de la ciudad. Hoy día han desaparecido los puentes medievales y los que se conservan en pie son contemporáneos. Destacan especialmente dos: el Puente de Piedra y el Puente de Hierro. El Puente de Piedra (Pont de Pedra o de Isabel II) data de 1856 y sustituyó al puente medieval de San Francisco, que tenía tres arcos góticos y torre defensiva. El actual fue construido con bloques de la típica piedra gerundense, con abundantes fósiles de nummulites, y se diseñó para circular personas y toda clase de carruajes.
18. Puente de Hierro
El Puente de Hierro sobre el Oña, pintado en rojo, es otra de las imágenes más bellas de la ciudad, ya que desde él se contemplan panorámicas de las casas colgadas sobre el río con la Catedral y la torre de Sant Feliu sobrevolando sus tejados. También es conocido como el Puente de las Pescaderías o puente de Eiffel en honor a Gustave Eiffel, cuya empresa lo construyó en 1877. Posee escaleras de acceso y es de uso peatonal. Anteriormente existieron varias pasarelas de madera en el mismo lugar, junto a las pescaderías viejas, pero se deterioraron con las frecuentes inundaciones.
19. La Leona
 
En el número 19 de la calle Calderers se encuentra la columna con la legendaria Leona de Girona, símbolo medieval de la ciudad. A una columna de piedra del siglo XII, de estilo románico y de 3´76 metros de altura, se aferra la escultura de una leona que mira hacia Sant Feliu. Cuenta la leyenda que este era uno de los puntos de acceso a la ciudad y que aquí se encontraba el Hostal de La Leona que permaneció abierto hasta la Edad Media. Con los años se hizo costumbre el gesto de besar y tocar el culo de la Leona como una especie de bautismo simbólico para aquellas personas que entraban o dejaban Girona. El ritual se acompañaba con la frase: "No es un buen ciudadano de Girona quien no besa el culo de la Leona...". También dice la leyenda que "Todo buen gerundense que quiere volver sano y salvo de un viaje está obligado a besar el culo de la leona, así como todos los visitantes de la ciudad que deseen volver algún día a Gerona".
20. Ferias y mercados
Gerona cuenta una gran variedad de ferias y mercados al aire libre que se celebran a lo largo del año.
*Mercado de las Ribes del Ter Mercado ambulante que se celebra en el parque de la Devesa, ubicado en pleno corazón urbano. En unos 200 puestos situados al aire libre se pueden adquirir numerosos productos: frutas y verduras, ropa, calzado, complementos y perfumería. Se celebra todos los martes y sábados por la mañana.
*Feria de artesanía y de productos alimentarios artesanales Plaza de Miquel Santaló. Segundo y cuarto viernes de cada mes.
*Feria de productos artesanales Calle de Santa Clara. Sábados, excepto julio y agosto. Ferias de Sant Narcís, Navidad y puente de la Constitución.
*Mercado de la Leona. Plaza de Sant Feliu y calle de Jaume Pons i Martí. Primer y segundo sábado de cada mes.
*Mercado de las flores. Rambla de la Llibertat. Se celebra los sábados.
21. La noche

Los locales de ocio nocturno se extienden por toda la ciudad, especialmente en el centro. La Plaza de la Independència y la Plaza de Sant Feliu y sus alrededores concentran la mayor parte de la oferta de establecimientos, desde restaurantes y cafés con terrazas hasta locales musicales con más ambiente. Las noches de los jueves muestran especial animación con la presencia del público universitario, adelantándose al fin de semana.
22. El Celler de Can Roca

Girona cuenta con una excelente gastronomía, no sólo de cocina catalana, como demuestra el prestigio de varios de sus restaurantes entre los que cabe destacar El Celler de Can Roca, considerado uno de los mejores del mundo por la prestigiosa revista Restaurant Magazine. Galardonado con 3 Estrellas Michelin ofrece una cocina de autor de la mano de los hermanos Roca: Joan, Jordi y Josep. Cocina de vanguardia con raíces y espíritu de innovación. Menú degustación (5 platos y 2 postres): 125 €. C/ Can Sunyer, 46. Tel. (+34) 972 222 157. www.cellercanroca.com /.
Ver link http://www.viajeroshoy.com/gastronomia/los-10-mejores-resauranes-del-mundo.html
23. El xuixo de Casamoner

El xuixo o xuxo, en castellano `suso´, es un delicioso pastel dulce típico de Girona elaborado con una masa fina de forma cilíndrica rellena de crema, frita y azucarado por fuera. Sus orígenes parecen remontarse a los años veinte del pasado siglo cuando lo elaboraba el pastelero Emili Puig en un local que poseía en la calle de la Corte Real. El pastel está inspirado en otro francés llamado `chou à la crème´ que un repostero francés enseñó a Puig. Numerosas pastelerías de la ciudad reproducen con gran maestría este espectacular dulce. Los de Casamoner (www.casamoner.com) son deliciosos y puedes encontrarlos en diferentes tiendas de la ciudad: C. Santa Clara, 45; Ctra. Barcelona, 215; C. Migdia, 13 y Av. Sant Narcís, 89.
24. Arquitectura modernista

La arquitectura del modernismo y del novecentismo está presente en el urbanismo de Girona, fruto del crecimiento y la transformación de la ciudad a inicios del siglo XX. Un paseo por sus calles, tanto del centro como de los barrios, permite admirar bloques de apartamentos, casas unifamiliares y edificios industriales de arquitectos como Rafael Masó (Bloque Batlle, Farinera Teixidor, Casa Masó, "la Punxa" y Casa Gispert Saüch), Eugeni Campllonch (Casa Franquesa), Isidre Bosch Bataller (Casa Furest y Casa Noguera), Joan Roca Pinet (Casa Norat y Casa Rigau), Josep Martí Burch (Bloque Auguet) y Enric Catà Catà (Destilerías Regàs y Destilerías Gerunda)...
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